Hay veces que nos gustaría que la vida fuera predecible, los ancestros mazatecos muy bien sabían que la naturaleza sorprende con los comportamientos que son propios de los cerros y las montañas, es decir las deidades que los chamanes hacen referencia hasta al cansancio, pero comprendidos por pocos y entendidos por muchos.
Una comprensión exhaustiva de estos sucesos, propios de los dioses y reyes, a través de las costumbres y la lengua; haría, sin duda alguna, de nosotros como gente de conocimiento, más proactivos. Hay avances, es oportuno decirlo, pero no suficientes.
Fuente: (xinde, 2017)